como mujer apesto

todos los blogs que hablan sobre mujeres muestran un prototipo en el que yo no encajo. nunca me ha interesado aprender a combinar mi ropa, comprar artículos de decoración o preocuparme de mi pelo tinturado. no tengo tiempo y, aunque lo tuviese, siento que hay demasiada vida allá afuera como para perder minutos en tratamientos capilares o vitrineos.

probablemente todas esas mujeres que escriben en blogs de niñas o que siguen sus consejos viven rodeadas de hombres que las encuentran bonitas y femeninas. en mi caso, creo que aunque pasara frente a los maestros del costanera center nadie me gritaría ni un piropo. porque es imposible, mi preocupación personal es escasa, me compro ropa dos veces al año sólo en liquidaciones y mucho menos me maquillo o tengo idea de cómo hacerlo correctamente.

lo reconozco, la belleza no es mi fuerte. pero tampoco tengo otras virtudes femeninas; mi departamento está lleno de cajas de pizza y comida congelada porque no sé cocinar ni un huevo, olvido las fechas importantes, no me gusta el espumante y tampoco entiendo los códigos de coqueteo. así la lista suma y sigue.

según el ideal convencional, como mujer apesto. caleta.